Bueno, como se ha dicho algunos ya han dado el paso, y me alegro por ellos un montón, eso si con una envidia cochina, de esta que sacamos los canariones...de esas que te remuerden por dentro, y no te deja pensar en otra cosa que en decir, jodios estos, la suerte que tienen, si si, igual como al que enfrente tiene un vecino y le toca la loteria, pues eso. Bromas a parte, esta familia crece en todos los sentidos, en gente noble, en amistad, en centimetros cúbicos..., Antes había un diablillo, de esos que salen a la derecha del hombro y al contrario está el angelito, pues ahora hay cuatro diablillos a mi derecha y jo... como tientan los jodios. Yo por ahora lo dejo pal año que viene, o pal otro si hay suerte, y me conformaré con verlos a todos en cada ruta, en cada encuentro, disfrutando de la compañia de mis amigos en estos lares que Dios nos ha puesto como Islas Afortunadas. Dioooooos, que melancolico me pongo, pero es que, me dais una envidia... Nos vemos el 30. Luis Guerra.